El uso de tecnologías de información y comunicación posibilita la ejecución de programas con diversos niveles y complejidades educativas, expandir el rango de los sectores sociales a los que se ofrece servicio, así como su personalización para satisfacer con mayor efectividad las necesidades particulares, lo cual ha originado que la comunicación y el trabajo en grupo o colaborativo son posibles a distancia, con herramientas y dinámicas que permiten crear y desarrollar constantemente proyectos en diferentes áreas del conocimiento.
El recurso tecnológico apoya al proceso de enseñanza, por un lado en la presentación de la información; y por otro, en la utilización de gráficos, animaciones, audio y videos. Con las herramientas tecnológicas podemos compartir propuestas, informaciones, material instruccional, puntos de vista y expectativas. Al mismo tiempo, el estudiante puede percibir su propio progreso mediante ejercicios de autoevaluación, y recibir orientaciones sobre el grado y la calidad de los conocimientos adquiridos.
La Educación a Distancia
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